Para escribir un artículo sobre un animal, deberás primero describirlo, y después añadir otros datos como su hábitat (dónde vive), sus costumbres, su alimentación o su reproducción.

Describir un animal es muy fácil. Basta con observarlo detenidamente, y seguir un orden más o menos lógico. Si además investigas sobre él, puedes encontrar más información interesante para añadir a tu trabajo.

Para ello, sigue estas pistas:

1. Clasifícalo por su aspecto: si es vertebrado o invertebrado, mamífero, ave, insecto…
2. Cómo es: alargado, rechoncho, tiene patas, plumas, pelo, .., etc.
3. Acuérdate de utilizar expresiones para situar cosas: arriba, en el cuerpo, a la derecha, delante, detrás, sus patas, y sigue un orden: cabeza, cuerpo, patas, cola,…
4. Utiliza adjetivos que te ayuden a decir cómo es: alto, bajo, grande, verde,…
5. Cuenta dónde vive o de dónde procede, si hay varios tipos,…, etc.
6. Aprovecha lo que hemos estado viendo en clase: por qué son así este tipo de animales, de qué forma se reproducen, qué les sucede cuando se ven en peligro,…, etc. Si no te acuerdas, investiga por tu cuenta.
7. Añade cualquier dato o curiosidad que creas de interés.
8. Facilita las cosas a quienes vayan a leer lo que tú escribes: separa las oraciones con puntos, y utiliza comas cuando estés enumerando algo. Cuando cambies de tema, pon punto y aparte.
9. Piensa bien antes de escribir y ordena tus ideas.
10. Vuelve a leer lo que has escrito, y revísalo. Si no entiendes algo, es que no lo has explicado bien.

Un ejemplo: Los bichos palo

El bicho palo es un insecto. En realidad se llaman fásmidos, del género Phasmatidae. La especie que tenemos en clase se llama clonopsis gallica.

Su cuerpo es alargado, y tiene forma de rama. Esto le ayuda a camuflarse para defenderse cuando se siente en peligro.

Es de color verde o marrón, según el tipo, y algunas variedades pueden tener alas. También tiene dos ojos y dos antenas, como la mayoría de insectos.

Viven generalmente sobre los arbustos o árboles de los que se alimentan. Son animales nocturnos: se alimentan por la noche, y no se alejan mucho de las plantas que comen. Los más jóvenes se mueven y se desplazan más que los adultos.

Son herbívoros, y suelen comer hojas de rosal, de hiedra o de fresal.

Como son insectos, son ovíparos, es decir, se reproducen por huevos. Su ciclo de vida dura más o menos un año.

Durante ese ciclo de vida, muda de piel unas seis o siete veces. Otra curiosidad es que puede desprenderse de sus patas si le ataca otro animal, y le vuelven a crecer otra vez.